Segmentando el marketing de contenidos llegamos al contenido personalizado o smart content.
El contenido inteligente o smart content nace de la segmentación y personalización del inbound marketing. En otras palabras, personalizar el contenido según las necesidades e intereses de las personas que se han registrado en nuestra web. Este contenido es cambiante como las necesidades e intereses de dichas personas, por esta razón, el smart content también es conocido como “contenido dinámico”. Esta información la podemos obtener por sus compras, por sus descargas, qué productos ha visitado, cuáles ha metido en la cesta de la compra, en cuáles se detuvo más, en cuáles no, etc.
¿En dónde podemos ofrecer este contenido personalizado? El contenido inteligente lo podemos integrar en cualquier lugar en donde vayamos a encontrar a nuestro futuro cliente: en las landing pages, en el botón call to action, en el email…
Para llevar a cabo esta técnica de segmentación personalizada, en primer lugar debemos crear diferentes contenidos, uno será común para todos los usuarios y otro personalizado para cada visitante según sus intereses. En el caso de hacer una campaña de email marketing personalizado, debemos segmentar de manera muy precisa para llegar al objetivo que deseamos, hacer email marketing con smart content.
¿Cómo podemos crear una campaña de email marketing personalizada? Muy fácil, lo primero que debemos hacer es seguir los siguientes puntos básicos.
En primer lugar debemos tener una base de datos centralizada en donde se almacenen los datos, el histórico y la interacción del cliente con la web.
Elige un gestor de contenidos de fácil edición adaptada a las necesidades del negocio y de los clientes. Para poder optimizar nuestro smart content con el gestor de contenidos, debemos poder editar el contenido mostrando y ocultando imágenes y texto según el usuario único que esté visitándonos en ese momento.
A estas acciones debemos integrar el email a la base de datos, de manera que se podrá segmentar los emails como las páginas web. De esta manera, habremos mejorado la experiencia del usuario en un muchísimo por cien. El usuario (la persona) ve y lee lo que quiere ver y leer, ¡es magnífico!
¿Cómo podemos optimizar la creación de contenido personalizado?
Una vez tengamos la información necesaria como para crear contenido personalizado, la utilizaremos para ofrecer al cliente lo que quiere leer. Por ejemplo, si han comprado una cuna para bebés, no sería recomendable volver a ofrecerles una cuna que ya han comprado. Lo ideal sería mostrarle complementos de la cuna para bebé como un juego de sabanitas, sonajeros, carruseles para la cuna, etc.
Debemos facilitar siempre la compra eliminando pasos innecesarios, por ejemplo, si el usuario ya ha realizado otra compra anteriormente, no le volvamos a pedir todos sus datos. Lo único que podríamos preguntar es si quiere recibir el pedido en otra dirección. Si es un cliente habitual y siempre compra las mismas cosas, podríamos guardar sus productos favoritos para que ahorre tiempo en su proceso de compra yendo a “tiro hecho”.
Estos sencillos detalles nos diferenciarán mucho de la competencia y generará engagement.
