Y tú, ¿llegas a tu cliente?
Los usuarios, cada vez más familiarizados con las nuevas tecnologías, navegan más por internet, con más confianza, visitando nuevos sitios antes desconocidos y accediendo desde multitud de dispositivos.
Uno de los ejemplos más claros lo tenemos con el comercio electrónico.
Hace unos años, los usuarios, dudábamos y desconfiábamos de las compras por internet. Celosos de nuestra identidad y de nuestros datos bancarios, solo unos pocos daban el salto y hacían alguna que otra compra online.
Con el paso de los años, internet se convirtió en el “libro de consultas”. Los usuarios acudíamos a la red en busca de información objetiva de otras personas. Buscábamos opiniones, relatos de la experiencia de otros usuarios, información adicional… Nos gustaba contrastar la información que nos ofrecía el comercial de turno con la opinión de los usuarios reales que navegan por internet.
En la actualidad, los clientes hemos tomado las riendas y nos hemos convertido en unos grandes compradores. El consumidor actual de internet, es un comprador profesional.
Los consumidores actuales vemos internet como otro canal de compras que ofrece multitud de posibilidades y ventajas. Por ejemplo, comparar precios sin movernos del sofá, ojear diferentes productos desde market places o comprar en tiendas que no están en nuestro lugar de residencia. Todas estas ventajas a un clic y ¡desde nuestra casa!
Pero, ¿y las empresas? ¿Se han adaptado a esta evolución comercial?
Entendiendo que ahora somos los clientes quienes buscamos satisfacer nuestras necesidades utilizando nuestro criterio, leemos, comparamos y decidimos desde dónde comprar y a quién comprar, podremos comprender que las reglas han cambiado desde hace mucho tiempo.
Las marcas ya no son todopoderosas (excepto la que el cliente considere una Love Brand). Los clientes nos movemos por internet como pez en el agua. Es una evolución que ya no tiene retorno. Las empresas que no se han adaptado, deben evolucionar, apostar por lo digital y sumergirse en estrategias multicanal o se quedarán en el olvido.
“Si no está en internet, no existe”.
Si tienes una empresa y aún no has dado el paso a la estrategia multicanal o no has terminado de hacerlo, aquí te expongo unos sencillos pasos que debes seguir:
- ¿En dónde está tu público objetivo? Encuéntralo y marca una estrategia muy segmentada.
- Entiende cómo funcionan los diferentes medios en donde se encuentra tu target, cómo se puede interactuar con los diferentes canales y cuál es la actitud de tu potencial cliente en estos sites.
- No te olvides de conversar con el cliente. La comunicación B2C se ha quedado obsoleta. Ahora hablamos del H2H (human to human). Personas que hablan con personas.
- Ofrece a tu público contenido de calidad y engánchalos. Es la única manera de crear una comunidad.
- Monitoriza y optimiza todas las acciones. Como comenté en el anterior post, lo que se puede medir, se puede mejorar.
- Y… optimizar, optimizar y optimizar. El cliente es la razón de ser de cualquier empresa ecommerce, por lo que, debemos trabajar para ofrecer la mejor experiencia al usuario posible.
Y tú, ¿llegas a tu cliente?